domingo, diciembre 17, 2006

Musas y sirenas. 14 de mayo

Domingo 14 de Mayo
17:53h
ya ha pasado un mes...

Un mes. Un mes sin ver a Carol, Dafne y Sonia. A ninguna de las tres. Un mes pensando sólo en mí, un mes sin “Nístrim Finde”.
Un mes. Un mes para conocerme.
“Le Vibrazione” escapa por la mini cadena de la oficina, en Vetusta.
Mi tripa vuelve a estar hinchada. Comienza el ciclo...
Il compositore di nuvole si rinchivole in un libro di favole oniriche...
Un mes para conocer: Isabela, Matilde, Arantxa, Patrizia, “Funny” Alsina, Nikkio, Andrea, Izaskun, Maite, Johana...
Un mes para llorar, un mes para reflexionar.
Un mes para recordar, un mes para olvidar.
Un mes para desaparecer. Un mes para aprender.
Un mes para ganar. Un mes para descubrir. Un mes.
Un mes.
Sabes que aún te queda lo más importante. Sabes que aún no has llegado a una conclusión, que te es descriptiblemente difícil hacer creacionismo con un pilot. ¡Necesito un boli bic! Moreno solarium y las briznas diciéndome que aún no he logrado mi verdadero objetivo.
Sé que estoy nerviosa. Aún. Y que sólo soy una simple adicta al chocolate. Buscadora empedernida de la deseada autoestima. La perdí en algún lugar estúpido, como mi boli bic y la chapa de los Sex Pistols.
Arantxa, inconscientemente, se convirtió en mi psicóloga personal.
Génova me recordó momentos significativos de mi infancia.

A menudo imagino que caigo impotente al vacío y me convierto en una muñeca desmontada. Despojada de extremidades, fría, sin expresión. Una muñeca de plástico, hueca, como las imitaciones de Barbie que venden en los “Todo a cien”. Como las muñecas “María” que mi madre me compraba cada vez que íbamos a Haro a hacer la compra. Las “Marías” que tenía durante mis tres o cuatro primeros años de vida, cuando vivía en Castañares y ya, gracias al lanzamiento en VHS de “La Sirenita”, los dibujos de mi madre y el cuento de Ariel que logré memorizar de tantas veces que obligué a mi madre a leérmelo, soñaba con evadirme. Vivir bajo el mar. Ser una verdadera sirena.

2 cafés:

Anónimo dijo...

llorar, reflexionar,recordar, olvidar,desaparecer, aprender, descubrir, ...ganar. tenemos tanto tiempo para hacer estas cosas. para comer naranjas y saltar y correr por los prados XD. observar una ventana creyendo que hay alguien al otro lado observándonos, cuando en realidad es una puta habitación en la que la luz permanece encendida seguramente porque algún despistado se ha olvidado de apagarla. una sombra que acaba siendo un cuadro...una naranja que acaba siendo una droga y unas personas alas que acabo de conocer pero que acaban siendo mi vida. cuelga más capítulos, pues al leerlos te recordaré y cuando no te tenga cerca sentiré que te tengo ami lado. con nuestras paranoias sobrenaturales y nuestras locuras nocturnas. escribe mas. estoy enganchada ati. tkm

Adriana Bañares dijo...

Sara, no puedo decir más.. <¡te quiero!!!! (pero firma los comentarios, por favor)